LATINOAMÉRICA

La Policía de El Salvador lamenta la presión del Gobierno para cumplir con las cuotas de detenciones 

La guerra abierta decretada por el Gobierno de El Salvador contra las siempre peligrosas pandillas ha convertido a la Policía de este país en una máquina imparable de detenciones. Hasta el punto que desde el sindicato policial denuncian cómo los agentes se ven obligados a cumplir con unas cuotas diarias de arrestos que en ocasiones les llevan a apresar incluso a personas que nada tienen que ver con las pandillas.

Marvin Reyes, portavoz del sindicato policial de El Salvador, reconoce que “tenemos información de que el hotel de detenidos después de 30 días tiene que llegar a 20.000. Esas son las cifras que han establecido las autoridades gubernamentales”.

La lucha contra las pandillas se intensificó a finales del pasado mes de marzo, después de que murieran asesinadas en un solo día 62 personas como consecuencia de las rivalidades entre estos grupos.

El presidente Nayib Bukele decretaba entonces un estado de excepción que permitía a la Policía realizar detenciones sin explicaciones y pudiendo retener a los sospechosos durante 15 días sin cargos. El resultado, más de 10.000 detenidos y barrios, en efecto, más tranquilos.

“En muchos lugares la gente agradece que se les haya limpiado el barrio”, reconoce el agente Reyes. “Porque ya no aguantaban a estos sujetos que les cobran extorsiones cada día, les roban o que secuestran a sus hijas para violarlas o para convertirlas en mujeres de las pandillas”.

El estado de excepción no ha dejado de ser polémico también por otras cuestiones, como la prohibición a la prensa de “difundir mensajes de las maras”, con penas en caso de hacerlo de entre 10 a 15 años de prisión.

Unas restricciones que han originado un sinfín de condenas, entre ellas las del propio secretario de Estado de Estados Unidos Antony Blinken, que recientemente lamentaba la “censura” que sufren los medios en el país centroamericano.

Con Información de es.euronews.com