INMIGRACIÓN

Parole Humanitario para Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití

El ‘advance parole’ anunciado por el presidente Joe Biden el 5 de enero fue demandado por una veintena de estados republicanos encabezados por Texas. Alegan que el gobierno creó un nuevo programa de visas sin las formalidades de legislación que deben ser aprobadas por el Congreso.

El juicio que decidirá el futuro del programa de reunificación anunciado por el presidente Joe Biden el 5 de enero comenzará el 24 de agosto. Hasta entonces, inmigrantes originarios de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que buscan entrar a Estados Unidos podrán seguir aplicando al perdón humanitario por medio de un patrocinador autorizado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

El juez federal Andrew Drew Tipton, de la Corte Federal de Distrito en Victoria, sur de Texas, fijó para esa fecha el inicio de la causa, entablada la última semana de enero por una veintena de estados encabezados por Texas, todos ellos gobernados por republicanos.

A finales de febrero Tipton decidió no aceptar, por el momento, el pedido de los demandantes, quienes pidieron a la corte suspender el “advance parole” del 5 de enero mientras el tribunal tomaba una decisión final.

El programa o perdón humanitario de Biden forma parte de una estrategia para permitir la entrada legal de inmigrantes cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos al país, las cuatro principales nacionalidades de extranjeros que en los últimos años han llegado a la frontera en busca de asilo, generando una crisis humanitaria sin precedentes.

El reglamento del ‘advance parole’ indica que los ciudadanos de los cuatro países señalados que no tengan visa solo pueden entrar a Estados Unidos por medio de un patrocinador autorizado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

Una vez conseguido el aval del gobierno, los beneficiarios deben ingresar a Estados Unidos vía aérea con un pasaporte vigente. Llegados a un puerto de entrada, son inspeccionados por la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP), agencia que les da admisión para que puedan permanecer en el país durante dos años y gestionar un permiso de trabajo.

Durante el tiempo de permanencia autorizado los titulares deben ajustar su estatus por cualquier vía legal vigente, tal como el asilo. De no hacerlo, deberán salir del país o serán deportados.

‘Advance parole’ para cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos: l

a demanda

El grupo de demandantes del `advance parole’, programa que permite la entrada de hasta 30,000 refugiados mensuales de los cuatro países señalados, presentó a la corte de Victoria una demanda de 39 páginas en la que se alega que el gobierno, a través del DHS, “bajo el pretexto de impedir que los extranjeros crucen ilegalmente la frontera entre puertos de entrada, ha creado efectivamente un nuevo programa de visas sin las formalidades de legislación que deben ser aprobadas por el Congreso”.

Los demandantes señalan, además, que el poder de libertad condicional del DHS “es excepcionalmente limitado” y advierten que ha sido restringido por el Congreso “varias veces y puede usarse solo caso por caso derazones humanitarias urgentes o un beneficio público significativo”.

A pesar de estas limitaciones, los estados contrarios al programa humanitario indicaron que “el plan del DHS permite que extranjeros puedan obtener una autorización anticipada para ingresar a Estados Unidos, a pesar de que no hay otra base legal para que lo hagan”.

“El programa de libertad condicional establecido por el DHS falla en cada uno de los tres factores limitantes de la ley. No es caso por caso, no es para urgencia por razones humanitarias y no promueve ningún beneficio público significativo”, se lee en el escrito.